El sello de María Luisa Brahm en su paso por la presidencia del Tribunal Constitucional

Este 9 de agosto se cumplieron dos años desde que el Pleno del Tribunal Constitucional (TC) elegía a la ministra María Luisa Brahm como la nueva presidenta del organismo, en reemplazo de Iván Aróstica. Así, el 28 de agosto de 2019, la exjefa de gabinete de la primera administración del presidente Sebastián Piñera, juraba en su cargo, al que pone fin este martes, cuando se buscará a su reemplazante.

Brahm aterrizó en el TC el 18 de marzo de 2013, luego que el mandatario la designara como integrante del organismo. Y más tarde asumió la presidencia del organismo con la meta de realizar una mejor gestión y el prestigio del TC de cara a la ciudadanía, terminando con las críticas que penden sobre el organismo, en el sentido político respecto a que funciona como una tercera cámara.

Convencida de que esto se debía a los malos resultados y la lentitud con que se tramitaban las causas, Brahm implementó una serie de medidas administrativas que agilizaron la tramitación de las causas, aumentando el número de procesos que se revisaban cada año y disminuyendo con ello el atochamiento de causas.

Tras dos años logró avanzar en materia de gestión y cumplir con ello su principal cometido. No ocurrió lo mismo en lo que dice relación con el desprestigio del organismo, debido a que su gestión estuvo cruzada por disputas internas que se conocieron públicamente, esencialmente a partir de la polémica frase que dijo en una entrevista a La Tercera el 18 de abril de 2020 y que no cayó nada bien a un sector del TC: "Antes de que yo llegara, había causas detenidas en el TC por mucho tiempo y eso llevó a una situación que, yo diría, estuvo al límite de la corrupción", señaló.

Tampoco contribuyó a mejorar la imagen del TC su actuación en el marco de los retiros del 10% desde las AFP ni las denuncias por acoso laboral en contra la propia Brahm.

Así, con una imagen pública deteriorada, pero haciendo acopio de haber cumplido el objetivo de mejorar la gestión del organismo, Brahm llega al final de su presidencia, donde ya se hacen apuestas acerca de quién la reemplazará.

Para las 16:00 horas de mañana martes está citado el Pleno Extraordinario para elegir al nuevo presidente del Tribunal Constitucional y los nombres que más se mencionan son los de los ministros Miguel Ángel Fernández y Juan José Romero, aunque desde el interior del organismo apuntan a que este último sería el favorito para encabezar el TC, que es visto más bien como independiente de La Moneda, lo que aparentemente juega a su favor, pues contrastaría con la línea asumida por Brahm durante su gestión.